Aprender en casa resulta diferente, requiere de mayor esfuerzo, dedicación, concentración y de ajustarse a una organización que nos permita avanzar y disfrutarlo.
En contextos particulares como el del aislamiento debemos limitar las aspiraciones y no sobre exigirnos, porque en la adaptación a nuevos métodos entran en juego muchos procesos que debemos asimilar y experimentar a un ritmo propio.
Asimismo, la enseñanza online es una tendencia que avanza y se consolida desde hace ya algunos años en un mundo cada vez más globalizado y demandante, que avanza a un ritmo frenético, por lo que la virtualidad permite achicar las distancias y aumentar la productividad.
Es por eso que emprender una cursada online es una muy buena decisión por varios motivos:
-Te da la posibilidad de estudiar donde y cuando quieras.
-Te permite compatibilizar el estudio con otras actividades.
-Te da más autonomía y promueve el compromiso y la responsabilidad.
-Da una experiencia de aprendizaje por múltiples canales con recursos más dinámicos y entretenidos.
-Te permite ahorrar tiempo y dinero.
-Implica una formación más personalizada y con mayor interacción.
-Te ofrece el material digitalizado y disponible desde cualquier lugar.
-Te permite organizar tu tiempo y trabajar a tu ritmo.